- Misión Boves condena el ataque artero de las fuerzas militares del Estado colombiano contra un grupo de seres humanos en territorio de la República de Ecuador. Este ataque revela: 1) el increíble pero evidente interés del Gobierno de Colombia porque se interrumpan las sucesivas liberaciones de rehenes en poder de las FARC. 2) El padrinazgo que sobre sus acciones criminales mantiene el Gobierno de Estados Unidos. 3) El empeño de Colombia en criminalizar a países vecinos suyos, los cuales han iniciado procesos de liberación política y económica, o al menos ensayos de distanciamiento de la hegemonía que los ha sojuzgado durante siglos. 4) Que Colombia está siendo utilizada por Estados Unidos como cabeza de playa para tratar de socavar la estabilidad de los pueblos, países y Gobiernos que han decidido mayoritariamente ensayar formas de organización distintas al capitalismo y a las formas colonialistas de sujeción al poder hegemónico mundial.
- Consideramos inadmisibles, ridículas y falsas las versiones según las cuales en una computadora hallada, según el Gobierno de Colombia, en el lugar de la masacre (Putumayo, Ecuador), y en otras dos que están por encenderse, se encuentran las pruebas que demuestran una alianza de los Gobiernos de Venezuela y Ecuador con las FARC para derrocar al presidente Uribe.
- Encontramos asimismo repudiable, asquerosa, digna de castigo y susceptible de denuncia penal por traición a la patria, la actitud de la derecha venezolana evidenciada en su uso de sus medios de información, que ante la posibilidad o inminencia de un ataque armado ya tomaron posición a favor del enemigo. En Venezuela existe plena libertad de expresión y hay suficientes razones (políticas, éticas y de adecuación pragmática al escenario de guerra sucia) para que el Gobierno venezolano mantenga en vigencia esa situación. Sin embargo, alertamos a las expresiones del Poder Popular organizado, al pueblo en general y a los organismos competentes para que, en caso de recrudecimiento de la ofensiva colombiano-estadounidense contra Venezuela, tome medidas legales o de cualquier otra naturaleza para que los enemigos de nuestro país no tengan libre y abierta vocería en nuestro territorio, como la tienen hasta ahora. La libre expresión de ideas es un valor universal que debe ser defendido y preservado en cualquier situación, pero cuando las herramientas de la información son utilizadas como armas en beneficio de entes extranjeros cuyo fin es acabar con la paz en nuestro país; cuando el uso irresponsable, criminal y abyecto de los medios de información amenaza con socavar la soberanía nacional; desmoralizar a los venezolanos haciéndoles creer que el extranjero tiene razón en todo y que lo venezolano es indigno y corrupto; con destruir infraestructura vital para nuestro desenvolvimiento como conglomerado humano; con impeler a nuestros enemigos a destruir masivamente vidas humanas, lo éticamente correcto es sacarlos de circulación. Evitar la difusión y propagación de sus mensajes.
- Por lo antes enumerado, el Colectivo Misión Boves se mantiene en situación de Alerta. Conservamos nuestra condición principista de colectivo libertario sin jefaturas o autoridades formales que nos capitaneen. Sin embargo, en momentos en que está en juego la sobrevivencia de lo venezolano, y del proyecto de país (llamado “bolivariano”) que ha servido como caldo de cultivo para muchas iniciativas nobles y revolucionarias, asumimos como norte en las actuales circunstancias las decisiones actuales y eventuales del Presidente de la República, Hugo Chávez Frías. Consideramos sus directrices como ejes básicos para nuestra propia acción, en la actual situación y también si ésta u otra degenera en otras situaciones de mayor gravedad.
5 de marzo de 2008
Frente a la insolencia colombiano-estadounidense, y frente a la actitud de sus voceros en Venezuela: Misión Boves en situación de Alerta
Comunicado público número 2.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario